El perro azul espera que caiga el fruto del árbol de llamas.

Salvado de los muchos puntos de tinta que se traspasaban de las notas consignadas al respaldo de las hojas, durante una reunión en la que establecíamos un proyecto similar al del perro: objetivos, actividades, cronograma, recursos… Quizás menos goloso, pero no todo puede ser así.

Tres peces voladores muy veloces, muy descomplicados, muy...

Los peces voladores surcan los mares con saltos de 50 metros de longitud nadando a 60 kilómetros por hora. El tarot de la chocolatina jet me mostró la lámina del pez volador cuando le pregunté cómo abordar un trabajo para un cliente extraviado en un mar de incertidumbres. Seguí el sabio consejo y logré sortear dicho mar con saltos precisos (o al menos eso creo). Como ayudamemoria de la lección aprendida apareció este matacho en mi libreta. 

 Zoe quiso aparecer en la publicación, también le hace ilusión el pez volador.

El paso de la luna pera hace brotar sobre las colinas del planeta templos de altos buitrones con bibliotecas henchidas de relatos eróticos. A su paso, se escucha la serenata de aullidos de los cinco perros. 

El tema se repite de muchas maneras...

En algún lugar del entresijo crece y florece el jardín de los deseos.

Nótese el error en la fecha del dibujo. No hay actos fallidos. Este año me propuse no hacer lista de deseos y surgió este matacho y mi única alternativa fue fecharlo mal de manera inconsciente.